16/11/16
Si en alguna ocasión has sido abusado sabes que jamás querrás la repetición. Este es la primera entrada en una serie sobre abuso espiritual -- como reconocerlo y evitarlo. La novia de Cristo sufre demasiado hoy día bajo el poder y la influencia de líderes que abusan de su poder, de la confianza de sus seguidores y hasta de la misma palabra de Dios. Hay varios resultados perjudiciales para los que se encuentran bajo la influencia de líderes lobos. Uno es esclavitud emocional, espiritual y hasta a veces social, todo el opuesto a la libertad que Cristo dijo experimentarían sus seguidores al conocer la verdad. Otro resultado es un falso sentido de superioridad espiritual por parte de personas que cumplen con estas enseñanzas. Y un tercer resultado es la gente que cree y vive en el error tiende a perpetuar una falsa paradigma para la vida cristiana, sea esto un legalísmo orgulloso al cumplir con sus compromisos superficialmente, o una desesperación depravador al verse incapaz de hacer lo suficiente y cumplir con las continuas demandas no realistas. Sus amigos, familiares y compañeros de trabajo muchas veces evalúan y juzgan el cristianismo por el estado de vida de estas personas, y rechazan la caricatura presentada como si fuera la actual realidad.
Por eso es de suma importancia poder reconocer las características de abuso religioso, y no solo evitarlo en sus demostraciones excesivos como lo veamos en las sectas, pero tambien equiparnos para ver esos rasgos y tendencias más sutiles que tarde o temprano conducirán a situaciones de manipulación y abuso espiritual.
En las siguientes entradas trataremos temas como: liderazgo dominante, el uso de manipulación y miedo, control de información accesible a las personas, aislamiento social y espiritual de influencias positivas, y las formas en que se fomentan y perpetúan ideas de superioridad dentro del grupo.
Estas tendencias no solo existen dentro de las sectas (como vamos a ver) pero se pueden manifestarse dentro de iglesias y denominaciones bien sólidas y doctrinalmente conservadoras y bíblicas.
Por ejemplo, un pastor nuevo con una teología bien formada en las doctrinas de la fe puede tener una fuerte preferencia para música de órgano y piano. Lo que comienza como una preferencia personal sobre estilo de música, al cual acude la congregación para acomodar a su nuevo pastor, puede, a través de meses y años convertirse en algo ya 'no-negociable' hasta el punto de que cualquier sugerencia o deseo para ampliar los estilos de música usados es visto y tratado como ataque contra la autoridad del pastor. De pronto los gustos musicales se convierten en una prueba de fe y los que comparten la posición del pastor se sienten superiores, y los que no comparten su preferencia son vistos como rebeldes, descarriados, traidores y no dignos de liderar o tener influencia dentro de la congregación.
El resultado dentro de no mucho tiempo pueda ser una iglesia caracterizada por egoísmo, superficialidad, divisiones, chisme, legalísmo y contienda. Se puede estar predicando "un evangelio sano y sólido" desde el púlpito, pero la vida interior de la iglesia está podrida y tóxica para los que asistan. La receta para mejorar es humildad, arrepentimiento y un firme compromiso con poner a muerte nuestra carne mientras vivimos gozosamente el amor y la aceptación que tenemos de Dios por medio de Cristo.
¿Has experimentado abuso espiritual? ¿Has conocido iglesias que son sanas, equilibradas y proveen un ambiente de saludo y libertad espiritual? Comparte tus experiencias en los comentarios.
La próxima entrada tratará el tema de liderazgo dominante.
humilde guardaespaldas de la novia de Cristo,
Papa Joel